El zumo de remolacha podría ayudar y mantener la salud cerebral en la edad adulta
El zumo de remolacha tiene un alto contenido en nitrato dietético, que nuestro microbioma oral procesa y convierte en óxido nítrico, una molécula que desempeña un papel clave en la transmisión de información entre las células y la regulación de los vasos sanguíneos.
La Universidad de Exeter pretende investigar cómo los cientos de especies de bacterias y otros organismos que colonizan nuestra boca (conocidos como el microbioma oral) influyen en procesos clave para el desarrollo de las principales enfermedades, incluidas las cerebrales, como el alzhéimer y otras demencias.
Las personas mayores suelen tener una menor producción de óxido nítrico, lo que se asocia a una peor salud vascular (vasos sanguíneos) y cognitiva (cerebro). Las dietas ricas en verduras y hortalizas de hoja verde contienen nitrato, pero pocos adultos consumen cantidades suficientes. Investigaciones anteriores de Exeter han descubierto que beber zumo de remolacha altera el microbioma oral, indicando niveles más altos de óxido nítrico, lo que significa un menor riesgo de enfermedad e inflamación.
La profesora Anni Vanhatalo, catedrática de Fisiología Humana de la Universidad de Exeter, es una de las investigadoras principales del nuevo estudio. Según ella: “El microbioma oral se reconoce cada vez más como una vía apasionante para la investigación de la salud cognitiva”.
“La Universidad de Exeter ha liderado investigaciones anteriores que sugieren que el nitrato dietético, que se encuentra en el zumo de remolacha, puede mejorar la función cerebral. Nuestro ensayo clínico es necesario para ver si podemos confirmar estos hallazgos en personas mayores. Este proyecto tiene un potencial muy interesante para incidir en la detección precoz del riesgo de demencia. En el futuro, podría dar lugar a la introducción de dietas individualizadas cuyo objetivo sea estimular el microbioma oral, de forma que se pueda prevenir o retrasar el deterioro cognitivo en la tercera edad”.
Se seleccionarán 60 participantes de la plataforma online PROTECT. A la mitad se le enviarán suplementos de zumo de remolacha y la otra mitad recibirá un zumo de remolacha especialmente elaborado sin nitrato dietético, para que actúe como placebo en la investigación. Todos los participantes realizarán pruebas cognitivas al principio y al final de un periodo de 12 semanas en la plataforma PROTECT, además de proporcionar muestras de saliva para detectar cualquier cambio en su microbioma oral.
Anne Corbett, profesora de investigación sobre la demencia en la Facultad de Medicina de la Universidad de Exeter, dirige la plataforma PROTECT. “PROTECT acoge a más de 25.000 personas mayores de 40 años a través de una plataforma digital, hecha a medida para apoyar ensayos como este”, expresa Corbett.
“Todavía estamos abiertos a la selección, y pueden inscribirse personas mayores de 40 años”.
La investigación cuenta con el apoyo de una donación de Tom Morgan, exalumno de la Universidad de Exeter (Economía Empresarial 1999).
El estudio está dirigido por la Universidad de Exeter y el Instituto de Psiquiatría, Psicología y Neurociencia (IoPPN) del King’s College de Londres, y financiado por el Centro de Investigación Biomédica Maudsley del Instituto Nacional de Investigación Sanitaria (NIHR).
Fuente:
Professor Anni Vanhatalo
University of Exeter
https://www.protectstudy.org.uk