Cómo hacer tu propio sistema de riego
¿Cansado de regar a manguera o regadera? Regar un huerto o un jardín es sumamente sencillo si se sabe por dónde empezar, cómo distribuir los sectores, cuántas válvulas utilizar, qué tipo de programador. ¿aspersores? ¿goteo? ¿Rainbird? Te mostraremos cómo hacer tu propio sistema de riego.
Materiales básicos si quieres ver cómo hacer tu propio sistema de riego por aspersión y goteo
– Programador con al menos 3 o 4 conexiones a electroválvula.
– Tubería de 1/2 pulgada para distribución (es lo habitual pero hay más y menos diámetro de grosor).
– Conexiones en forma de T.
– Conexiones en forma de Codo a 90º.
– Tapones ciegos para cerrar manguerra de distribución.
– Electroválvulas.
– Arqueta (opcional).
– Difusores, aspersores etc. para riego por aspersión (normalmente césped).
– Manguera de riego por goteo de 16mm (con goteros integrados o sin goteros).
– Goteros para pinchar en la manguera en caso de elegir la que no los lleva integrados
– Manguera de riego exudante como tercera opción frente a las otras dos.
– Codos y “T”s para manguera de riego por goteo.
Todo estos productos de riego agrícola los podemos encontrar en tiendas físicas y por supuesto en tiendas online como Plantawa en la que la que solo en material de riego tiene más de 1000 artículos a la venta en stock actualmente. Vamos a ver qué consideraciones tenemos que calibrar antes de lanzarnos a montar. nuestro sistema de riego.
La presión de la toma es fundamental
No nos vamos a meter en clases de hidráulica, teorema de Bernoulli, pérdidas de carga y demás cálculos que sí se hacen en riegos profesionales. Pero sí se ha de tener en cuenta de dónde viene nuestra toma de agua y si la presión es suficiente si se trata principalmente de difusores para riego de jardín. El riego por goteo requiere, por lo general, de menos presión.
En ocasiones, la presión de la toma de agua no es suficiente para poder levantar la tobera de los difusores de riego si ponemos demasiados. Puede que la casa esté en un lugar elevado y que la diferencia de altura entre la vivienda y el depósito no sea demasiada como para dar una buena presión.
Recuerda que la presión de agua depende de la diferencia de alturas. Es lo que se conoce como energía potencial. Cuanta más sea la diferencia de cota entre el depósito y tu vivienda, mayor presión de agua tendrás. Lógicamente, cuando la diferencia es mucha se ponen válvulas de reducción de presión para evitar que los sistemas de distribución de agua se deterioren por presiones excesivas.
Si la presión no es suficiente, habrá que sectorizar.
Saber si la presión no es suficiente muchas veces es cuestión de ensayo-error. Es la madre de la ciencia y lleva mucho tiempo pero en aplicaciones no profesionales muchas veces prevalece y lleva tiempo y dinero pero también agudiza el ingenio y te hace experto del problema concreto que tienes entre manos. Observas, y actúas en función de lo que intuyes o preguntas a los que saben y crees que pueden ayudarte.
Sectorizar permite que el caudal de agua se reparta en menos dosificadores y consigas mejores resultados en el riego por sector.
Elige el difusor de aspersión para bajas presiones
En el mercado disponemos de muchos difusores de riego para el jardín. Los tenemos para una gran variedad de presiones y caudales con toberas más pequeñas o más grandes y con mayor radio de alcance (esto suele venir directamente relacionado con la presión que soportan).
El caso es que si tienes problemas de presión lo lógico es usar difusores de tobera estrecha con presiones de trabajo de entre 1 y 3 bares que suelen ser lo mínimo que pueden tener.
Si aun así no consigues presión suficiente para que la tobera del aspersor levante solo te queda un «apaño casero» que un servidor ya ha tenido que hacer porque no había más remedio. Aquí ya nos metemos en manipulación del difusor así que la garantía queda invalidada. Ten en cuenta esto. No son caros así que merece la pena probar.
La solución más drástica es acortar el muelle interno de la tobera o cambiarlo por otro con menos fuerza y en última instancia quitarlo del todo. La consecuencia de esto último es que una vez que el agua empuje la tobera y riegue, cuando la electroválvula se cierre, la tobera del difusor quedará arriba y no bajará. Tendrás que o bien dejarla como está si no te importa o bajarla con la mano.
Si tienes goteo y aspersión sectoriza. Las necesidades no son las mismas.
En muchas ocasiones además de césped (aspersión) queremos algún frutal o huertecito para cultivar nuestras propias hortalizas y verduras. En estos casos también se debe sectorizar el sistema de riego para conseguir diferentes programas, tiempos de riego y horas de comienzo del riego.
Un césped no tiene las mismas necesidades hídricas que un huerto y además, los sistemas de difusión de agua no tienen nada que ver. La aspersión puede venir mal a algunas plantas del huerto (enfermedades criptogámicas, efecto lupa del sol en las hojas etc.)
Por lo general el riego por goteo requiere de bastante menos presión para funcionar que el riego por aspersión, así que el factor limitante será la aspersión en cuanto a la presión van a ser siempre los difusores de riego del césped.
Fuente: fruticola.com