Nematodo del enanismo de primavera de la fresa- Aphelenchoides fragariae
Nematodo del enanismo de primavera de la frutilla, Aphelenchoides fragariae, es un tipo de gusano cilíndrico, microscópico e invisible al ojo humano, que ataca a las plantas de frutilla, especies ornamentales y otros cultivos, ocasionando daños principalmente en el rendimiento.
Esta plaga no se encontraba presente en Chile (plaga cuarentenaria) y fue detectada por los laboratorios del SAG. Por ello el Servicio estableció una serie de medidas de emergencias mediante la Resolución N°4.481 de 2022.
¿Cómo se propaga esta plaga?
Se disemina a grandes distancias especialmente a través de material de propagación contaminado; y a distancias más cortas de una planta a otra, principalmente trasladándose a través del agua sobre la superficie de las plantas.
¿Qué síntomas se presentan cuando ataca a frutillas?
– Malformaciones en el brote
– Hojas deformadas y retorcidas, zonas descoloridas con una superficie dura y áspera, además de hojas de menor tamaño con bordes arrugados.
– Enrojecimiento de los pecíolos, entrenudos cortos de los estolones
– Racimos de flores reducidos con sólo una o dos flores.
– Deformación del fruto
Otros síntomas del nematodo del enanismo de primavera de la frutilla
– Muerte de la yema de la corona.
– El plegamiento en las yemas de la corona y en las yemas de los estolones provoca pequeñas áreas de alimentación secas y marrones que pueden verse en las hojas expandidas.
¿Qué medidas debo tomar si mi predio está en presencia del nematodo del enanismo de primavera de la frutilla?
Las enfermedades causadas por nematodos de las hojas (foliares) pueden reducirse mediante buenas prácticas culturales. A continuación se detallan algunas medidas de manejo para disminuir el impacto de la plaga:
– Utilizar siempre plantas sanas.
– Aumentar la distancia de plantación para evitar el contacto planta a planta.
– Estricta revisión y limpieza de las plantas que presenten síntomas de infestación; ello para minimizar las pérdidas. Esto incluye la eliminación y destrucción constante de plantas infectadas mediante quema (siempre y cuando esté autorizada por la autoridad competente) o enterramiento (a una profundidad de 1,5 metros con adición de cal).
– Control permanente de malezas que pudieran actuar como reservorio del nematodo.
– Al terminar la producción de la temporada, en caso de haber tenido plantas con sintomatología, se recomienda dejar el suelo libre de cultivo como mínimo por tres meses.
– Si es posible, se recomienda realizar rotación de cultivos con especies no hospedantes de la plaga, posterior al período de barbecho.
– Se sugiere el cultivo de especies no hospedantes y que tengan algún efecto nematicida, por ejemplo el brócoli, el cual deberá ser incorporado al suelo para que tenga efecto sobre la plaga.
Más medidas a tomar
– Desinfectar los implementos agrícolas, tractores, maquinaria agrícola, bodegas, cajas cosechadoras que hayan tenido contacto con productos contaminados ubicados dentro del predio. Éstos deben ser limpiados con una solución de cloro comercial diluido en agua en proporción de 1:5 (1 litro de cloro en 5 litros de agua). Desinfectar las herramientas con alcohol al menos al 70% o Hipoclorito de sodio al 1%.
– Para el establecimiento de un nuevo cultivo de frutilla, se deben seleccionar plantas o partes de plantas, sanas y libres del nematodo, trabajando en suelos limpios, teniendo en cuenta aumentar la distancia de plantación.
– Manejar la humedad en el follaje; debe evitarse el exceso de humedad y las salpicaduras de agua en los tallos y hojas, así como el contacto entre plantas.
– Tender a la utilización de riego por goteo.
– Se sugieren riegos en las primeras horas de la mañana para disminuir la humedad en el follaje.
– Disminuir la frecuencia de riego en épocas de mayor humedad ambiental.
– Manejar el drenaje; se recomienda la plantación en camellones para evitar el encharcamiento.
– En predios altamente contaminados por la plaga, sin retorno económico para el productor/a, se recomienda analizar la factibilidad de eliminar por completo las plantas y restos vegetales del suelo a través de quema o enterramiento profundo. Posterior a ello, dejar el suelo en barbecho mínimo tres meses para disminuir la carga de nematodos.